Para responder exitosamente al enorme desafío de financiar los proyectos para frenar y reversar la pérdida de la biodiversidad en el mundo, hay múltiples mecanismos públicos, privados y mixtos de movilización de fondos.
El Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), que fue propuesto en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro de 1992 y firmado en diciembre de 1993, cuenta con 196 países firmantes. Su órgano rector, denominado Conferencia de las Partes (COP), se reúne cada 2 años para revisar los progresos, fijar prioridades y adoptar planes de trabajo.
La decimosexta reunión de este órgano, la COP 16, se desarrollará en la ciudad de Cali entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre próximos. Su objetivo principal es la revisión del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, adoptado en la COP 15 de Montreal de 2022, que establece una hoja de ruta para que los países firmantes desarrollen acciones a nivel nacional para el cumplimiento de sus 4 objetivos y 23 metas, con el fin de detener y revertir la pérdida de biodiversidad hasta 2030.
Los objetivos del Marco Global se enfocan en:
"la salud de los ecosistemas y las especies, el uso sostenible de la biodiversidad, el reparto equitativo de [los] beneficios de la utilización de recursos genéticos y en la puesta en marcha de [los] medios para la implementación y la financiación. Entre las 23 metas se plantea la conservación de al menos el 30% de las zonas terrestres, de aguas continentales, costeras y marinas, la restauración del 30% de los ecosistemas degradados, la reducción a la mitad de la introducción de especies invasoras y a reducción de US$ 500.000 millones al año en subvenciones perjudiciales”
(Marco mundial Kunming-Montreal de la diversidad biológica, 2022)
Estos objetivos y metas, que hacen parte de la hoja de ruta que se debe aplicar a nivel nacional, establecen el marco para la contribución a la diversidad biológica y de ellos se derivan las alternativas de acción por implementar.
En conjunto con las Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, el CDB hace parte de la estructura concebida en Río 1992 para el desarrollo de las acciones encaminadas a la protección del planeta. La relación entre sus objetivos es muy estrecha, puesto que la protección y la restauración de los ecosistemas tienen efectos directos muy positivos para la lucha contra el cambio climático. En efecto, los indicadores de mitigación y de adaptación al cambio climático se ven beneficiados por las acciones orientadas a la protección de la biodiversidad, puesto que los sistemas naturales son depósitos naturales de carbono, que contribuyen a la mitigación, y son a la vez fuente de producción y acumulación del agua, de regulación de la temperatura y de arraigo de las capas vegetales, contribuyendo a los objetivos de la adaptación.
Los proyectos orientados a la protección de la biodiversidad son en consecuencia muy relevantes para el cumplimiento de los objetivos asumidos por los países firmantes en los diferentes escenarios de las Convenciones de las Naciones Unidas. Colombia se ha comprometido seriamente con estos lineamientos y así lo ha ratificado mediante la “Estrategia Nacional de Cambio Climático a 2050” de 2019 y la actualización de la “Contribución Determinada a Nivel Nacional” de 2020, dos propuestas que incluyen las metas nacionales que comprometen la acción de todos los actores nacionales y la financiación de las iniciativas. En el mismo sentido, para la COP 16 Colombia deberá presentar actualizados sus Estrategias y Planes Acción Nacionales sobre Biodiversidad, para lo cual deberá proponer un plan de financiación para el desarrollo de las iniciativas .
Con el propósito de cumplir con los objetivos y las metas del CDB, los países han desarrollado a lo largo de los años un amplio conocimiento acerca de lo que hoy se conoce como las Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN).
Estas se refieren a los enfoques que se inspiran en los procesos naturales para la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad. A diferencia de los proyectos que se basan en el uso de infraestructura, con soluciones mediante intervenciones artificiales, las SBN se enfocan al aprovechamiento de las dinámicas propias de los sistemas naturales. De esta manera, las SBN pueden generar múltiples beneficios, pues controlan los efectos del cambio climático, disminuyen las pérdidas de biodiversidad, protegen los ecosistemas y generan resiliencia en las comunidades.
Según el reporte Folu 2019, estas son las principales categorías y objetivos propuestos por las SBN:
Categoría | Objetivo |
Protección de bosques y otros ecosistemas | Reducir la deforestación |
Reducir la pérdida de manglares | |
Reducir la degradación y conversión de humedales de páramo | |
Gestión de bosques y otros ecosistemas | Mejorar la gestión de los bosques |
Gestión de incendios en pastos para ganadería | |
Rehabilitación de bosques y otros ecosistemas | Forestación y reforestación |
Rehabilitación de humedales costeros | |
Reducir las emisiones del sector agrícola | Reducir la fermentación entérica |
Gestión del estiércol | |
Gestión de nutrientes | |
Mejorar el cultivo de arroz | |
Captura de carbono en el suelo en el sector agrícola | Agrosilvicultura |
Aplicación de biocarbón a partir de residuos de cultivos agrícolas | |
Mejorar el carbón orgánico presente en el suelo de las tierras de cultivo | |
Mejorar el carbón orgánico presente en el suelo de pastos para ganadería | |
Energía | Bioenergía con captura y almacenamiento de carbono |
Lado de la demanda | Aumentar el uso de cocinas limpias |
Reducir la pérdida y desperdicio de alimentos | |
Impulsar el cambio a alimentación saludable y sostenible |
Teniendo en cuenta el potencial de mitigación, de protección de biodiversidad, de ecosistemas y los co-beneficios sociales y económicos en las comunidades, el potencial de las SBN es muy grande en Colombia y se convierte en una prioridad de la política de gestión del cambio climático. Sin embargo, según el reporte de la Coalición para la Alimentación y Uso del Suelo (2023), para desbloquear el potencial de SBN en Colombia se necesitaría una inversión anual 5 mil millones de dólares de Estados Unidos (USD) hasta 2050, lo cual implicaría la intervención y el diseño de diversos instrumentos de financiamiento diferentes a la financiación pública en los niveles nacional y local.
Basados en información del DNP 2021, la inversión total en SBN durante 2019 fue de 280 millones de USD, de los cuales el 51% provino del Presupuesto General de la Nación, (PGN), 32% de recursos públicos internacionales, 10% de los mercados voluntarios de carbono, 8%de la Banca Nacional de Fomento y el 1% del sector privado nacional.
La brecha de financiamiento que se evidencia entre los montos y las fuentes plantea la necesidad de potenciar los mecanismos públicos existentes, tales como los bancos de hábitat; promover el uso de dispositivos, como las Obras por Impuestos para el desarrollo de proyectos SBN, y recurrir a dispositivos alternativos de financiación, que potencien la participación de actores públicos y privados bajo un esquema de finanzas combinadas.
Los Bancos de Hábitat son zonas para la protección de la biodiversidad y los recursos naturales, que se enfocan en la realización de actividades de preservación, restauración, rehabilitación, recuperación o uso sostenible del suelo para la conservación de la biodiversidad. Los Bancos de Hábitat generan beneficios en materia de mitigación y adaptación al cambio climático, pero, adicionalmente, se pueden catalogar como soluciones basadas en la naturaleza que generan co-beneficios económicos y sociales.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS) promueve su desarrollo como un mecanismo para disminuir la deforestación y promover la conservación y la restauración ambiental. Las administraciones locales y las organizaciones sociales pueden promover su desarrollo con múltiples beneficios para las comunidades que se relacionan con los mismos. Mediante diversos mecanismos de compensación, los Bancos de Hábitat pueden ser financiados por recursos provenientes de las empresas que desarrollan obras y proyectos que cumplen con sus obligaciones ambientales mediante estas iniciativas.
El involucramiento de las comunidades locales en el desarrollo de los Bancos de Hábitat es un componente esencial, que involucra diversos actores en zonas apartadas de la geografía. De esta manera, se convierte en un mecanismo de generación de ingresos derivados del pago por la protección de los ecosistemas, en lugar de la explotación tradicional de los recursos, que genera impactos negativos para el medio ambiente.
Las SBN lideradas por el Estado pueden encontrar en este mecanismo una alternativa que permite complementar el uso de recursos públicos con recursos de origen privado. Este instrumento permite que las empresas que contribuyen al impuesto de renta y complementarios, con ingresos superiores a 33.600 Unidades de Valor Tributario (UVT)1 —el equivalente a COP $1.220.000.000 en 2021—, implementen proyectos inversión con impacto social, mediante la destinación del 50% del impuesto de renta para proyectos de infraestructura vial, educación pública, salud pública, agua y alcantarillado, y energía.
A pesar de tener un alto potencial, este instrumento ha sido poco utilizado en Colombia. Mediante el esquema Obras por Impuestos se busca desarrollar proyectos en los municipios de las zonas más afectadas por el conflicto armado (ZOMAC) y los que hacen parte de los Programas de desarrollo con enfoque territorial (PDET).
Los proyectos se deben inscribir ante la Agencia de Renovación del Territorio (ART) y, aunque los proponentes pueden provenir del sector público, de la empresa privada o de las organizaciones sociales, su ejecución siempre será acompañada por la entidad que ejerza la autoridad sobre el sector al cual pertenezca el proyecto. Una vez los proyectos son registrados, pueden ser financiados con este mecanismo. Los contribuyentes pueden (a) aportar los recursos para que los proyectos sean ejecutados por las entidades públicas o (b) liderarlos y proponer que sean ejecutados de la mano con las autoridades competentes.
Mediante la participación de diferentes fuentes, la financiación combinada permite estructurar diferentes mecanismos para realizar los proyectos climáticos, y puede ser una alternativa de alto impacto para aumentar los recursos disponibles para las SBN, dado que atrae diversas fuentes de capital privado.
La estructura tradicional de los instrumentos de financiación combinada parte de la participación de capital concesional, que sirve para movilizar capital privado. El capital concesional proviene por lo general de fuentes públicas nacionales o internacionales, o de fondos de capital de impacto o filantropía. El capital concesional tiene la función de disminuir las condiciones de riesgo, para permitir la participación del capital privado en condiciones de mercado.
Algunas estructuras pueden utilizar los fondos provenientes del capital concesional, que se consigue a tasas inferiores a las tasas de mercado, para disminuir el costo general del proyecto o para disminuir el riesgo del proyecto. De esta manera, al actuar sobre las variables de evaluación, se permite un mejor el perfil del riesgo frente a la rentabilidad esperada y se atrae así la inversión de capital privado en condiciones de mercado.
También se pueden desarrollar esquemas mediante los cuales los inversionistas concesionales mejoran el perfil del riesgo mediante el otorgamiento de garantías o de seguros a costos inferiores a los de mercado; la financiación de la asistencia técnica para mejorar la viabilidad comercial y el impacto del proyecto, o la financiación del diseño o de la preparación del mismo.
La realización de la COP16 en los próximos meses en Colombia es un gran hito para el posicionamiento del país como líder mundial en la protección de la biodiversidad y el uso sostenible del suelo.
Nuestro país siempre ha sido un actor importante en el ecosistema internacional del cambio climático. De hecho, desde los inicios de la búsqueda de soluciones para este problema, ha demostrado su compromiso al asumir metas desafiantes en materia de protección de la biodiversidad.
En razón de lo anterior, es muy importante que se le dé especial atención a la actualización de las Estrategias y Planes de Acción Nacionales sobre Biodiversidad, que serán objeto del análisis de las diversas delegaciones que harán parte de la COP 16 y que mostrarán la ruta para diversos países de condiciones similares tanto de la región como del hemisferio sur.
Los medios con que se financien las políticas relacionadas con la biodiversidad deben estar a la altura del reto, y por eso es claro que los montos para lograrlo deben aumentar significativamente y los instrumentos para hacerlo deben potenciarse según las oportunidades.
Mediante la ampliación de la estrategia de los Bancos de Hábitat como herramienta del gobierno para promover la protección de amplias zonas del territorio nacional, el incentivo para la empresa privada en la participación en proyectos de Soluciones Basadas en la Naturaleza mediante un esquema renovado de Obras por Impuestos y mediante la utilización de esquemas alternativos, como las Finanzas combinadas, se pueden encontrar formas para contribuir eficazmente al aumento del flujo de recursos para la protección de la biodiversidad.
Coalición para la Alimentación y Uso del Suelo [FOLU Colombia]. Una tierra próspera, un pueblo próspero: Financiamiento escalable para soluciones basadas en la naturaleza en Colombia. https://folucolombia.org/reporte-sbn/
Convergence. Blending Global Finance. (2023). State of Blended finance. Climate Edition. https://www.convergence.finance/resource/state-of-blended-finance-2023/view
Departamento Nacional de Planeación [DNP]. Análisis del Financiamiento Climático, 2016-2019. https://colaboracion.dnp.gov.co/CDT/Ambiente/Finanzas%2520del%2520Clima/Analisis-del-financiamiento-climatico-2016-2019-en-Colombia.pdf
Programa para el medio ambiente de las Naciones Unidas [UNEP] y Convenio Sobre la Diversidad Biológica [CBD]. Marco Global Kunming-Montreal. https://www.cbd.int/doc/decisions/cop-15/cop-15-dec-04-es.pdf
The Food and Land Use Coalition [FOLU]. Prosperous Forests. https://www.foodandlandusecoalition.org/knowledge-hub/prosperous-forests/#downloadForm
Juan Pablo Parra
Docente y Coordinador Programa Capstone
Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales
juanpablo.parraroj@uexternado.edu.co
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